martes, 21 de junio de 2011

¿Quién sobra?



Sobra tanto
Quien  con soberbia de su ego,
 quiere ser  Dios siendo Lucifer,
 más atractivo que los demás falla en halagar,
 satisfecho en vanidad.

Sobra tanto
Quien se mira al espejo y le devuelve la imagen de otra persona,
por envidia desea algo que alguien más tiene,

 se siente bien con el mal ajeno.

Quien tiene más enemigos que compañeros que le digan la verdad.

Sobra tanto
Quien tiene que elegir un sustituto y se considera más capacitado,
prefiere con  avaricia mantener su puesto, acumulando la riqueza del trabajo,
Quien tiene pensamientos posesivos sobre otra persona,
 condena las cosas eternas por las cosas mundanas.

Sobra tanto
Quien a la incapacidad de aceptar la existencia de uno mismo por pereza,
le embarga una  «tristeza de ánimo» que le aparta de sus responsabilidades,
 a causa de los obstáculos y dificultades que en ella encuentra.
Quien deliberadamente y con pleno consentimiento de la voluntad,
 siente desgana de las cosas a las que está comprometido.


Sobra tanto
Quien consume de manera irracional o innecesaria su existencia,
 gula y lujuria incluyen formas de comportamiento destructivo,
no modera la atracción de los placeres.

Sobra tanto
Quien niega vehemente la verdad,
 fanático en sus creencias, desea mal a otros,
 la ira de sus manos le lleva hacer injusto.

Más no sobra tanto
Quien consciente de pecado, lo transforma en virtud.
Quien muere lentamente recitando a Neruda,
recuerda que estar vivo exige esfuerzo más allá que el simple hecho de respirar.
Aquél a quien felizmente no le sobra ni un poema para alabar.
Quien sobrando tanto, cree que no sobra nada, ni nadie.



gnv/6011