jueves, 31 de enero de 2013

"ANGELITA"


Cuesta menos sonreír que explicar la tristeza, pero me encuentro abatido y ni siquiera los rendidos músculos faciales se esfuerzan por disimularlo. Si lucho sé que puedo perder, pero sin luchar todo estará perdido. Lo malo es que no sé realmente el motivo del decaimiento, bueno sí lo sé, o creo saberlo, pero prudentemente no lo desvelaré.
¡Vamos, arranca que no tenemos todo el día!


Cada uno sabe sus cosas y no es cuestión de estar delegando las penas, cada uno que aguanté su mono ¿Qué fácil dar consejos? ¿Qué difícil seguir la receta?
Las exigencias de una dieta sana me lleva a la locura ¿qué absurdo? Bueno, voy a contar algo. Hoy fui al cardiólogo para la revisión anual de mis “stents”, los llevo en las arterias desde hace ya ocho años, sin mayor problema. A pesar de que el electro y la tensión arterial dieron resultados satisfactorios, la doctora que sustituía al titular, despiadadamente arremetió contra mi comportamiento al final del inquisidor interrogatorio.
- ¿Usted ha fumado?
- Algunos días, en ocasiones especiales, ... unos pitillos sociales.
- Por la tos que tiene, estas Navidades ha tenido muchos días especiales.
- Lo justo para pasar el rato.
- ¿Se tomó las medicinas?
- Los días que me acordaba. La del colesterol y el “adiro” ... casi siempre, ... cuando me siento mal.

Con una mirada desafiadora, sacó toda la pólvora dialéctica para acojonarme. Y sentenció:
Le mando lo mismo, no fumar y tomarse estas pastillas todos los días. Le pongo nueva cita para el próximo año. No me haga perder el tiempo con usted, ¡si no hace caso... !
¡Buenos días!
¡Buenos días!

¡Es el protocolo!, lo cumplió rigurosamente; ¡por lo mío que no se muera!, está advertido y el que avisa no es culpable. No le quitó la razón, pero eso lo tengo muy repetido, todos los días, por gente que me quiere, sin tanta acritud, y espero que lo sigan haciendo. Ingenuamente creí que al toser le estaba pidiendo ayuda médica para dejar de fumar, no para hundirme en una depresión.
A veces pienso que fumo para sentir dolor, para flagelarme por mis pecados como sí cumpliera la penitencia de mis males. Lo de no tomar las pastillas es por gandul o quizás por falta de convencimiento en la química farmacéutica. No son disculpas válidas, aunque me lleva a buscarme la vida con una solución alternativa que me cure este jodido catarro sin recurrir a la medicina oficial. Es mi coco lo que no anda bien, y yo tampoco voy con bronca médica, prepotente rayada de soberbia, movida por la interesada industria farmacéutica, por eso, recurriré a mis "piedras mágicas" para meditar una posible solución.

¡Qué bonita esta piedra! Es mi color preferido, se parece al color turquesa de las guaguas de Global, o mejor, al color índigo de los ojos de mi “Billo”. De este mineral se dice que favorece la curación en problemas de huesos, de tiroides y los relacionados con las vías respiratorias. La "angelita" posee una conexión con el chakra de la garganta, así que puede ser una buena aliada en la curación de cualquier problema de salud relacionado con ella. Además se la considera una piedra muy positiva que promueve la paz y la fraternidad.

La "angelita o anhidrita" no sustituye ningún tratamiento convencional, pero  es muy usada en gemoterapia para lograr beneficios saludables, por eso esta piedra te podrá ayudar a:

Eliminar bloqueos emocionales, sobre todo el rencor.
Promover la compasión y la comprensión.
Mejorar las habilidades de pensamiento.
Aliviar el dolor psicológico.
Facilitar la conexión con el mundo espiritual.

Esta "angelita" la he convertido en un angelical colgante, con alas y todo, por supuesto engarzado en plata de ley; he creado unos preciosos pendientes y un colgante muy sencillo, el resultado me complace. Con mi piedra natural, no he tosido más. Aunque es muy probable que esto suceda como efecto placebo. Si una persona piensa qué una piedra u otro objeto le ayudará a sentirse mejor o le dará suerte, es probable que se sienta más confiado y positivo y esto mismo logre que las cosas mejoren y produzcan un mayor bienestar y felicidad.
Yo tú la compraba, o desearía que alguien me la regalará para no gastarme el dinero en médicos. ¡Mi niño, dame una alegría!



Dicen los “expertos” que no hay una receta mágica para combatir la depresión. En el ser humano hay una tendencia natural a justificar las cosas, solo cuando tenemos una explicación de lo que sucede nos sentimos mejor, ya que así podemos orientar nuestra conducta, por eso se tiende a buscar una justificación, una causa o motivo de la enfermedad, y una vez "localizado", se trata de animar al enfermo a superar la supuesta causa, pero normalmente solo se conseguirá agobiarle, ya que él no sabe lo que le pasa, y los argumentos de los demás le abruman y le demuestran que no le entienden.
El “deprimido” manifiesta que no le sirven los argumentos, ni las explicaciones intelectuales. Estamos ante una alteración del estado de ánimo, y el ánimo tiene que ver con el mundo afectivo; ese será el camino más adecuado para ayudarle; hacerle sentir que se le quiere y que se le necesita.
Hacer ésto sin agobiar es un arte. Yo humildemente aquí lo he intentado con todo mi amor, y además, he encontrado la razón por la que dejar de fumar…, ¡por ahora!

martes, 29 de enero de 2013

¡Despierta "nhombre"!


Necesito decirte algo nuevo, porque mis palabras se agotaron con el tiempo. Palabra de Dios, palabra de Señor, palabra de Amo, palabra de Padre , de Hijo o de Espíritu Santo, repletas de honor y  amor, pero palabras viejas que no explotan ya en la mente de nadie. Quiero darte una palabra certera, que mate de una vez por todas mis palabras huecas, una palabra que al pronunciarla te levante el espíritu, que te haga llorar o reir, y nunca se apague en tu cuerpo, ni en tu alma.



Una palabra que no sea un número, un zombi, o un suicida , que no languidezca jamás; que brille, hasta de día más que el  sol;  que no muera de tristeza, como una luna solitaria en una noche llena de estrellas. Más esa palabra nueva no aparece, tal vez ni exista, o tal vez solo sea el sufrimiento de pensar en tu moribundo "NHOMBRE". (NO-HOMBRE)
Quizás no sea el significado de la palabra, sino su aliento, el que produzca la chispa de la esperanza,  la llama que alumbre más, cuando más oscuro esté; la que lo transforma todo, tanto, que termines siendo un hombre nuevo ese día, y eso será bueno. Pero ser un hombre nuevo todos los días, es mejor. Quiero que luches todos los días de tu vida, porque de esa forma, así, serás insustituible.
No te conformes con mis sueños, ¡Despierta, nhombre!



¿Quién eres? ¿Eres un dios?
No respondió el Budha.
¿Acaso eres un mago?, insistió de nuevo el hombre.
No, respondió de nuevo.
¿Eres un ser humano?
No, contesto nuevamente.
Entonces, ¿quién eres?
Soy un ser despierto.

Escúchame, pero hazlo con cuidado. Nuestro sistema es corrupto, con mecanismos de control insospechables, para ellos es más fácil matar en falsas guerras, más que convencer con palabras a miles de personas. Hemos sido programados y entrenados para creer el todo de los otros, somos vilmente guiados, dependientes y hábilmente manipulados. En estos tiempos de control y abuso de palabras, la dictadura de las letras se transmutará por el lenguaje del corazón, donde el pensamiento se expresará por las emociones y los sentimientos, así entenderás mi silencio, mi voz no cambiará las cosas, solo nuestro ejemplo.
Me acompañara, el ángel de la guarda, la mano de Fátima, un tambor de guerra, y otros símbolos y amuletos, aunque sin embargo lo importante, recuerda, es la piedra bruta que llevas dentro e irás puliendo al cabo del tiempo, ¡cuando despiertes al hombre o a la mujer que quisieras ser!

¿Como crear nuestro propio sustento?
Es hora de proponer un mundo para mañana, romper con el sistema y despertar con los ojos bien abiertos y esperanzados. El concepto de la realidad es una quimera de nuestros sentidos, somos probablemente un invento de nosotros mismos. Mi propia creación es una experiencia en un mundo ilusorio, tan solo es energía vibrando en distintas frecuencias y lo que percibo lo convierto en materia en medio de una sustancia intangible en la que todo esta conectado.
¡Aléjate del miedo! El temor es el instrumento que utilizan para someterte.
Cambia la matriz y céntrate en la energía que te da tu corazón. No te conformes con lo que te diga, aunque me moleste, eso tan solo significará que me importas y como “Risco” (el de la tele) utiliza el arte de molestar para ganar al menos autoestima, ya que las penas son de nosotros, mientras que las vaquitas serán siempre ajenas.
¿Los sueños son  de nosotros?  ¡amiga, amigo, déjame soñar!
Cuando recalcules tu mente como lo hace perseverantemente sin perturbarse el navegador-gps ante las equivocaciones o errores en la conducción, lograrás llegar gozosamente y felizmente a la meta sin perder satélites o a los que te acompañan. (Reflexión después de una cansina y estresante ruta, publicado en mi muro de Facebook)
Al fin y al cabo, nadie aprende en cabeza ajena, y como alguien dijo: la humanidad es una flecha que disparó un arquero a su libre albedrío.
¿Me gustaría saber quién fué?

Y no olvides que un “TOMTOM” (gps) también ayuda a no perderse por el camino y el “TONTO” (gabrielando), a su manera gateando por la vida, también.




jueves, 24 de enero de 2013

"De ratones y hombres"


Bien es cierto que un fin de semana en Zaragoza -o en cualquier sitio- cuando lo emprendes en solitario, no es  precisamente situación favorable, pero una vez superada la magua que produce la soledad y la pereza que provoca un día desapacible y frío, el hambre te levanta de la cama, cargadas las baterías del iPhone y del iPad, apagas el televisor de la habitación del hotel y arrancas la caña para pescar un rayo de sol en un nuboso día invernal al borde del Ebro. Ojo, no he dicho tómate una caña de cerveza y quédate ebrio, sin enterarte de nada, ni de nadie.


El chocolate con churros en la Chocolatería Valor, una tapa de setas o de champiñones con una copa de vino de Cariñera en "el tubo" -así llaman a la calle "4 de agosto"-, sería suficiente justificación para gozar de las bondades de Zaragoza, ya que las clásicas sabidas son patrimonio  de la humanidad. Mas éstas y las otras, no pueden ensombrecer el atractivo que tiene su amplia y variada agenda cultural, de ocio y entretenimiento.
En esta ocasión he tenido la oportunidad y la suerte de coincidir en mi estancia en el Sitio de Zaragoza con la programación de una obra  en el Teatro Principal, plenamente valiosa y vigente para comprender la situación actual. Se trata "De ratones y hombres", del escritor californiano, John Steinbeck. Me supongo que dicho así, muchos como yo de pronto lo desconocerán, pero por el díptico publicitario me entero que fue galardonado con el Premio Pulitzer en 1940 y recibió el Premio Nobel de Literatura en 1962, pero lo que no olvidará nunca mi generación, y las próximas, es aquella publicación "Al este del Edén", que  sería llevada al cine por Elia Kazan, en una película que protagonizaría el malogrado James Dean. 

 
"De ratones y hombres" es una historia estremecedora con un final terrible. Narra la vida y sueños de dos trabajadores del campo de California durante la Gran Depresión - George Milton, un hombre inteligente pero sin formación, y Lennie Small, un hombre de gran estatura y fuerza pero limitadas habilidades mentales - están en camino hacia otra parte. Esperan cumplir algún día su sueño compartido de tener sus propias tierras. La parte del sueño de Lenny es simplemente cuidar (y tocar) conejos suaves en la granja. Este sueño es una de las historias favoritas de Lennie, que George le cuenta constantemente. Están huyendo de su anterior empleo, donde huyeron de la ciudad después de que la afición de Lennie por abrazar cosas suaves fuera acusado de intento de violación cuando tocó el vestido de una joven. Pronto queda claro que los dos son muy amigos y George es el protector de Lennie. El tema de la amistad es constante en la historia.


Una historia sobre hombres y mujeres que se mueven en el vacilante límite entre la dignidad del ser humano y la animalización, como bien dice el director Miguel del Arco en la sinopsis de la obra. Entre la razón y el instinto. Entre los que luchan para salir adelante y los conformistas. Entre los que sueñan y los que, simplemente, duermen. Es una lucha extenuante que a veces no queremos afrontar o queremos ignorar. Pero si lo haces, si te paras y miras a tu alrededor verás que la lucha está interiormente iluminada por la grandeza de corazón y la grandeza de espíritu, por la dignidad, por el coraje, por la compasión, por el amor...
¡Duele, pero ilumina!
No desvelaré más la obra para dejarles la curiosidad y despertar el interés por conocerla. Tan solo por dar una pincelada wikipedia de la personalidad de Steinbeck les contaré que a lo largo de su vida uso el símbolo de Pigasus (de pig=cerdo, de pegaso, animal alado), un cerdo atado a la tierra aspirando a volar. Su éxito no estuvo exento de polémica y controversias por su crítica al capitalismo y el apoyo a la política de F. Roosevelt al defender su plan de mejoras sociales, lo cual le valió el rechazo del sector tradicionalista más conservador.
Después de las dos horas que dura el espectáculo, sin moverme de la silla y casi sin respirar para no molestar o por la tensión de la obra, necesitaba toser a gusto; por la antigua casa Fortea, encaminé la calle del Temple; paso por delante de la casa donde vivió el libertador de Cuba, José Martí; leo la frase esculpida en el mármol, sin saña; me asomo al Ebro buscando el agua que necesita un isleño, miré y gritó mi mente:
¡Coño, fuerte crecida! ¡Este río se va ha desbordar!
Salí volando (como buen canario), espantado de tanta agua bajando por aquella gigantesca acequia.
¡Y uno sediento y muerto de miedo! ¡Que injusto es este mundo sin Martí!


P.D.:
El espectáculo ha sido producido por Concha Bustos con la colaboración del Teatro Cuyás, cuenta con un magnífico reparto y un excelente equipo artístico y técnico.